Publicado en 24 Horas.
Las exigencias de tiempo y de rendimiento juegan en contra con la calidad del sueño .
¿Sospecha tener algún trastorno del sueño?
Las pruebas, trabajos y, por cierto, el carrete son una realidad que viven a diario los estudiantes universitarios, quienes no tienen horarios fijos y difícilmente administran su tiempo de descanso.
Por lo general, marzo es un mes de cambios importantes, en especial para los miles de jóvenes que en todo el país inician su vida universitaria. Un mundo nuevo que generalmente va acompañado de largas jornadas de estudio, contenidos difíciles de aprender, nuevas experiencias de diversión, distintas relaciones amorosas, entre otros, pueden ser una fuente de cultivo para un problema habitual pero que tiene solución: los trastornos de sueño . “El insomnio o la somnolencia diurna acompañarán los días de muchos estudiantes, pero lo bueno es que existe diversas formas de abordar esto, unas mejores que otras”, señaló el neurólogo y director médico de Clínica Somno , Pablo Guzmán.
Según comentó el especialista, una práctica habitual de algunos universitarios es automedicarse para no dormir: “A veces lo hacen con estimulantes para poder estudiar en las noches. Esto es negativo ya que produce una alteración en nuestro marcapaso interno (ciclo circadiano), produciendo a largo plazo desajustes en los horarios de sueño (con insomnio agregado), además de alteración en la secreción hormonal, presión arterial y otros procesos que tienen que ver con los horarios circadianos”, agregó Guzmán.
Tampoco es aconsejable tomar medicamentos sin prescripción médica para dormir: “Estos son adictivos y producen un sueño de mala calidad, con agotamiento a largo plazo por mal descanso, además de otros efectos adversos”, añadió el neurólogo.
Sigue algunos de estos consejos para tener hábitos de sueño saludable:
1. Tener horarios regulares para acostarse y levantarse durante toda la semana, incluidos los festivos.
2. El ideal para un estudiante universitario es dormir entre 6 y 9 horas. Chequear que esto se cumpla.
3. Utilizar la cama solo para dormir. Evitar que el estudio o trabajo sea en ella.
4. Evitar estudiar de noche, debido a que la falta de sueño afecta la consolidación de la memoria, por tanto, se pierde lo estudiado.
5. De sentirse muy agotado y necesitar dormir siestas, que estas no sean más de 20 a 30 minutos. Más tiempo que este hace que la persona caiga en sueño profundo, lo que provoca que al despertar se esté más cansado, y con peor desempeño cognitivo. Además, las siestas largas pueden provocar a largo plazo migraña o insomnio nocturno.
6. Si bien es difícil sacar las pantallas de la habitación, hacer el esfuerzo. La luz led de éstas disminuye la secreción de melatonina, que es la hormona que da sueño .
7. Tratar de bajar la intensidad de la luz a partir de las 21.00 horas, para de esta forma estimular el sueño .
8. No consumir bebidas estimulantes que prolongan el estado de vigilia. Estas solo tendrán un efecto rebote en nuestra salud.